YO TE MUESTRO EL CIELO

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Dios lo hizo todo hermoso para el momento apropiado. Él sembró la eternidad en el corazón humano, pero aun así el ser humano no puede comprender todo el alcance de lo que Dios ha hecho desde el principio hasta el fin.

Eclesiastés 3:11

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NO NECESITAS SER SABIO para saber que las personas anhelan algo más que la tierra. Cuando ves el dolor. Cuando ves hambre. Muertes sin sentido. Lágrimas interminables, innecesarias… pérdidas, preguntas ¿por qué?. Anhelas algo más. Tienes tus momentos especiales. El recién nacido sobre tu pecho, la persona amada en tus brazos, el sol sobre tu cara. Pero incluso esos momentos son apenas indicios de luz que atraviesan las ventanas del cielo. YO te atraigo hacia mi. Te provocó para que veas la realidad a través de mis ojos. Te animo. Te muestro. Esos momentos son aperitivos del plato que ha de venir. Tus pensamientos son tan cortos y miras a tu alrededor como un niño que se pone feliz por un juguete, tú crees que esa es la verdadera felicidad. El cielo está más allá de tu imaginación. Ni en tu momento más creativo, ni en tu más profunda reflexión, ni en tu nivel más alto podrás descifrar la eternidad. He preparado cosas que tus ojos no han  visto, ni tus oídos han oído, ni han llegado a tu mente. Esas son las cosas que YO tengo para ti porque me amas. ¡Esa es una promesa que te dejo!.-

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1 CORINTIOS 2.9; COLOSENSES 3:2; ISAÍAS 64.4