YO TE DOY FRUTOS
Son como árboles plantados a la orilla de un río, que siempre dan fruto en su tiempo. –
Salmos 1.3
¿CONOCES ESTAS PALABRAS?. Amor, alegría, paz, paciencia, amabilidad, bondad, fidelidad, mansedumbre, templanza. He puesto en ti esos “sentimientos” y sé que cuando surgen los disfrutas y recrean tu alma. Es el fruto del Espíritu. Pero así como un árbol que da fruto a su tiempo no puede hacerlo a menos que esté en buena tierra, tenga el agua y los nutrientes necesarios. Así también es este fruto en tu vida. Podrás disfrutar de ellos algún tiempo pero tarde o temprano se agotaran y empezará a florecer todo lo contrario. Necesito cavar y ablandar la tierra alrededor tuyo y eso te dolerá. Necesito que mi Espíritu sea el que te riegue, te de vida y te renueve. Necesito que te nutras con mi palabra. De lo contrario solo serás un inmenso árbol con grandes ramas y admirable fortaleza en el tiempo con tus logros personales pero sin hojas donde puedan refugiarse ni frutos con lo que puedas alimentar a los demás. Junto a mi tienes todo y puedes dar todo sin que nunca se acabe. -.-
GÁLATAS 5.22-23; LUCAS 13.6-9; JUAN 4.14