YO NO TE RECHAZO

Acuérdate de la palabra que diste a este siervo tuyo, palabra con la que me infundiste esperanza. Éste es mi consuelo en medio del dolor: que tu promesa me da vida. —

Salmos 119:49-5

MI PALABRA ES TU CONSUELO pero este mundo está lleno de voces duras e hirientes. Te dicen: “Debiste haberlo hecho mejor”; “Lo echaste todo a perder”; “En verdad no tienes lo que hace falta”; “Mira como esas personas avanzan y ni se preocupan en obedecerme”. Esas voces pueden hacerte trizas y hacerte sentir que no vales nada. Ninguna de ellas viene de mí. Aun cuando cometas un error, si te arrepientes, YO no te rechazo ni te avergüenzo. Te hablo palabras de amor y perdón. Te animo y te digo la verdad. Y la verdad es que sí tienes lo que hace falta, porque YO vivo en ti y conmigo tienes todo lo que necesitas, ya no te falta nada más. Escucha mi voz en oración y a través de mi palabra, déjame hablar a través de ti. Cuando te encuentres en una situación difícil, detente un minuto y permíteme darte las palabras que debes decir. Las palabras apresuradas no dejan espacio para mí. Permíteme usar tus palabras para animar y darme a conocer a los que te rodean.-.

ROMANOS 8.1; 1 CORINTIOS 6.19;  1 TESALONICENSES 4.18